Hace muchísimo que no escribo en el blog, muchísimo. Y hace muchísimo más tiempo que no lo hago por rabia e indignación. Rabia, indignación y enfado serían los adjetivos que calificarían mi estado de ánimo después de lo que pasó ayer. No voy a dar nombres, por dos motivos. Uno, porque no hace falta. Dos, porque los interesados van a saber perfectamente a quien hago referencia.
Escribir estas líneas no es fácil. Mostrar la realidad de lo que ha pasado, sin embargo, es una necesidad. Después que cada uno siga pensando lo que quiera pero yo me veo en la obligación de contar mi versión. ¿Es esta la verdadera? Es la mía y tendréis que ser vosotros quienes juzguéis. Por otro lado, quiero dejar claro que algunas personas ya me han juzgado, sin tan siquiera preguntar qué ha pasado. Hay quien antes confía en algún anónimo que en quien ha sido tu compañera de clase y, supuestamente tu amiga, durante años.
Empiezo con la historia desde el principio y para eso tenemos que trasladarnos a cuando aún estudiaba psicopedagogía. Hacía el último curso y, además, la Especialización Universitaria en Audición y Lenguaje de la UNED, promoción 10-11 (esto parece que no, pero es importante). Durante ese año descubrí que el trabajo de AL estaba realmente hecho para mi, que era algo que me gustaba, y de lo que me veía trabajando en un futuro. Dos de mis mejores amigas y compañeras de clase decían odiar la asignatura de trastornos del lenguaje y que en su vida harían la especialización universitaria. Pero nunca digas de esta agua no beberé...
El siguiente curso (curso 11 -12), se obró el milagro y al fin me llamaron de conselleria para trabajar. Era una vacante, pero que al haber salido en noviembre tan solo se consideraba substitución. Aunque me llamaron como PT, en realidad la plaza era de AL. Una media jornada en Menorca. Eso me alegró. Una porque tenia trabajo de lo que quería. Dos porque significaba que sería más fácil tener trabajo de AL, aunque fuera en Menorca.
Y así fue. El siguiente curso (12-13) me adjudicaron una vacante de AL en Ciutadella. Un placer volver a la isla y un placer trabajar de lo que verdaderamente quería.
Durante ese mismo curso, mis compañeras de clase decidieron hacer también la especialización universitaria de la UNED, supongo que porque vieron que tenía más salidas. He de reconocer que me molestó. Se suponía que eso no les gustaba. Sin embargo, no me quedó otra que aceptarlo. ¿Se lo podía yo prohibir? No, pero esto no quitaba que me molestara porque durante los dos cursos anteriores me dieron mucho el coñazo con el tema: menudo rollo, ¿como puedes estudiar esto?, esto nunca lo haría... y un largo etc. Sin embargo, eran (o eso creía yo) mis amigas. Así que acepté la situación y las ayudé en lo que pude/pidieron.
En ese tiempo, especialmente en verano del 2013, hubo algunas disputas personales entre mis dos compañeras y yo. Muy especialmente con una. Cosas que no vienen al caso pero que perjudicaron lo que yo suponía que era una amistad. Una de ellas lo tenía claro, yo no era su amiga, tan sólo era su compañera de clase.
Durante el año 2013 hubo un cambio de normativa en lo referente al reconocimiento de nuevas especialidades a partir de master o titulaciones de postgrado (Real decreto 1364/2010, de 29
de octubre). Según este decreto, las especializaciones o cursos de postgrado iniciados con posterioridad al 30 de octubre de 2010 no son válidos para reconocer nuevas especializaciones en el cuerpo de maestros. ¿Es esto justo, teniendo yo exactamente la misma titulación pero de dos convocatorias anteriores? La respuesta es no, pero yo no decido las normas. Eso significa que mis compañeras y muchos otros no pueden acceder a la función de AL con un postgrado, necesitan la titulación de maestro AL o de logopedia + maestro. Como digo esto no es justo, pero no soy yo quien decide este tipo de normativas. Sin embargo, si están escritas y publicadas en los boletines oficiales, hay que cumplirlas. Siempre.
En la convocatoria de interinos para el pasado curso (2013 -2014), mis compañeras intentaron acceder a la función AL, pero debido al RD 1364/2010, no pudieron. En la convocatoria para el próximo curso (2014 - 2015), sin embargo, las cosas han sido diferentes. A una de ellas sí le han reconocido la función pero a la otra no. ¿Cómo es posible si tienen la misma titulación? Un error de Conselleria al validar el título en el proceso de inscripción. Fallo grave, eso no lo niega nadie. Pero un error muy grave y del que se ven perjudicadas muchas personas de forma directa y otras muchas de forma indirecta. El problema no termina ahí. El grave problema viene cuando a ésta compañera le adjudican una plaza de AL para todo el año. Lo que significa que puede trabajar y puntuar. ¿Es justo cuando legalmente no le corresponde la plaza? La respuesta es no. Conselleria se equivocó, pero ella también, al aceptar una plaza de la que era plenamente consciente que no le correspondía.
¿Qué significa esto? Pues que a muchas personas no se le ha reconocido la función de AL con exactamente la misma titulación (entre ellas una de mis mejores amigas y otros muchos conocidos que hicieron el mismo curso). Y esto no es justo.
¿Cómo me afecta a mi todo esto? Pues muy sencillo. Se convierte directamente en una "competidora". No me mal entendáis. Pasa a tener reconocida mi misma función que yo, pasa a puntuar (con experiencia en la concertada y todos los puntos de formación posibles) y por tanto, puede fácilmente adelantarme en las listas de interinos cuando, recordemos, no le corresponde (de forma injusta, cierto, per no le toca). Puede sonar cruel, pero un punto más o menos en la listas, una persona delante más, significa tener más dificultades para conseguir una plaza. Si me adelanta alguien con titulaciones "legales", no me va a quedar otro remedio que aceptarlo pero no cuando alguien obtiene una vacante que no le corresponde.
¿Qué he hecho yo? Ponerme en contacto con sindicatos para que solucionaran el problema. Sin embargo, a mi no me escuchaban puesto que no me afectaba directamente. Entonces avisé a quien si le afectaba para fuera ella quien se quejara. ¿He hecho mal? Puede, pero tengo claro que esta persona no ha puesto ninguna reclamación en Conselleria, ni a los sindicatos. Por otro lado, quiero insistir en que he defendido mis intereses individuales, que en temas de trabajo, no entienden de conocidos o compañeros de clase. Además, si hubieran sido en sentido contrario... creedme que habría ardido Troya desde el minuto uno.
¿He puesto yo una reclamación en Conselleria? No, rotundamente no. Podría haberlo hecho, pero tengo un verano un tanto complicado y mis visitas a Palma son contadas. Me paso más tiempo fuera de España que en casa. Sí tengo constancia de que los sindicatos han recibido más quejas además de la mía, por lo que probablemente, por una vez, han sido ellos los que han actuado.
¿Qué ha pasado al final? La respuesta a esta pregunta no la tengo clara puesto que nadie se ha puesto en contacto para preguntarme o para darme una visión oficial del asunto. Parece ser que la Conselleria le ha retirado la vacante. Algo que me parece correcto, sin embargo, creo que no se tendría que haber llegado tan lejos. Conselleria tendría que revisar mejor las titulaciones y, sobretodo, los maestros tendríamos que ser más sinceros y cumplir la ley. Intentar "clavársela" a un organismo público parece ser un pasatiempo 100% typical Spanish. ¿Queremos enseñar esto a nuestros alumnos?
Para terminar, dos extractos de la presente convocatoria en el BOIB, pueden no venir a cuento, pero os aseguro que tienen un motivo.